lunes, 22 de marzo de 2010
Fic "Mein Engel" Capitulo 68
Desperté por un molesto dolor en la cabeza, trate de sentarme pero no pude, fije mi vista y vi a Tom, acurrucado en mi estomago, a cada lado tenía uno de sus brazos aprisionándome, se veía tan tierno. Asique sin más remedio me quede acostada en la cama, estire un poco mi brazo y alcance el control remoto y encendí la televisión con la esperanza de que distrayéndome se me fuera el malestar. Equivocada. A los veinte minutos de estar ruleteando la tv me sentía peor, mucho peor. El dolorcito ahora era fiebre y a ese malestar se le habían sumado unos cuantos más; dolor de estomago, nauseas y mareos. Cada vez era menos soportable, trataba de calmarme pero no pude y siendo algo tosca me levante de un brinco para ir al baño. Antes de encerrarme escuche un ruido, fue Tom de seguro con lo fuerte que me levanté lo desperté. Ya con seguro en la puerta, me agacha al inodoro y vote todo lo que “no había comido”. Me pare y enjuague mi boca y me lave la cara, al verme en el espejo note que estaba pálida, era por el dolor que sentía. Salí de mis pensamientos al escuchar la puerta.
Tom: amor? Estas bien? –me seque con una toalla y abrí la puerta, trate de poner buena cara, no era mi intención preocuparlo –que paso?
Aqua: no fue nada –camine hacia la cama y me apoye –perdón si te desperté
Tom: oh, está bien creo que más me preocupe al verte salir disparada –se sentó junto a mí- pero si estás bien?
Aqua: que siiiiii –le di un beso- qué hora es?
Tom: casi la una –se puso su reloj- te parece si preparamos el almuerzo?
Aqua: mmm –me paré y al estar frente a él me senté en sus piernas- y si mejor pedimos algo? –no sé de donde pero me habían entrado muchas ganas de comida chatarra- si?
Tom: creo que nuestra maña de comida chatarra se te pego –rió- no es saludable sabes?
Aqua: Tooooom –dije con voz de pequeña- porfiiiiiis! –le di un besito en sus labios- anda
Tom: está bien…pediremos comida –aplaudí- y….que quieres?
Aqua: pueeees….pizza! –me miró y sonrió
Tom: entonces pizza será –nos paramos- ahora mi querida esposa, mejor nos cambiamos –cada quien fue en busca de la maleta que trajimos, saque la ropa que me pondría y una toalla, quería darme una ducha primero. Entre pero no cerré la puerta, estaba dejando la ropa en un mueble que estaba ahí cuando el entro
Aqua: que paso?
Tom: me bañare –lo mire seria- que? ….Ay vamos
Aqua: no Tom, vamos…vamos –puse mis manos en su espalda y lo fui empujando– no me tardo –grite. Luego de unos diez minutos salí ya cambiada y con el cabello mojado, el estaba viendo televisión, al verme la apagó y entro. Mientras él se bañaba tendí la cama, junte la ropa sucia y me fui abajo buscando el cuarto de la lavandería. Como se estaba tardando en salir decidí recorrer la casa, todavía había partes que no había visto. Pase media recorriendo todos los cuartos que quedaban la mayoría solo eran salas de estar, algunas habitaciones y baños, abrí una de las últimas puertas solo que esta era de vidrio, entre y me sorprendí; enfrente mío estaba una piscina enorme, camine y vi unas sillas de madera, todo era bien bonito. Sentí unos pasos y voltee –no sabía que había una piscina
Tom: si, esta casa tiene de todo –me acerque a él- si quieres luego de comer, nadamos un poco
Aqua: me parece!
Después de estar un rato caminando por toda la casa, decidimos llamar a la pizzería, fue gracioso porque Tom quería con unos ingredientes pero yo quería con otros, creo que el que más sufrió fue el que nos atendía al teléfono porque si Tom le decía algo yo le quitaba el teléfono para decirle que no, no duramos mucho y decidimos hacerlo al azar, y toco lo que yo quería. Esperamos unos veinte y cinco minutos y escuchamos el timbre de la casa, ambos nos levantamos y fuimos a atender, luego de pagarle al chico nos sentamos en la mesa. Esta vez sí comimos. Al terminar volvimos a la sala, no entraríamos de una vez a la piscina a menos que quisiéramos que nos diera un calambre, mientras estábamos recostados sonó el celular de Tom.
Tom: alo? Ah hola!...Si, perdón…no para nada….cómo estás?....ya veo, todo bien?... ok, si es que tú ya sabes… claro…si aquí esta, ok espera –me miró- es Bill, quieres hablar con él? –asentí y me paso el celular
Aqua: hola Bill!! … si todo muy bien… en serio? Qué bueno! … ah si… eey! No digas esas cosas… está bien, ya chau –colgué y le pase el celular- dice que te llama mañana
Tom: ok –suspiró- sabes? Creo que esto es duro para los dos, toda nuestra vida hemos estado juntos…desde que éramos pequeños, en el colegio, en todo…siempre que uno estaba mal el otro lo consolaba, y ahora…se siente raro no estar con él, entiendes?
Aqua: bueno, nunca he tenido hermanos pero creo que te entiendo. El lazo entre gemelos son únicos, pero estoy segura que no importa si estás aquí o del otro lado del mundo…el sabrá que estas con él, aunque en unos días estarás con él –trate de sonar tranquila pero la verdad estaba celosa de Bill, el lo tendría toda su vida en cambio yo solo unos días.
Le sonreí y voltee mi cara hacia el lado contrario, podía sentir como mis ojos se llenaban de lágrimas
Tom: ey…-me abrazó- no te pongas triste, yo siempre estaré contigo, no llores si? Mejor cambiemos de tema, no hay porque estar triste…ven –se levantó- nos toca ir a la piscina! –sonreí, el siempre lograba sacar una sonrisa por más triste que estuviera….
Luego de mi pequeño “bajón” subimos al cuarto y nos cambiamos, ya con la ropa de baño nos dirigimos a la piscina. Deje las toallas en las dos sillas de madera.
Aqua: Tom dejo tu ropa acá? –espere su respuesta pero en vez de eso solo hubo silencio- Tom? –al voltearme no vi nada –Tom?.... si estas escondido no es nada gracioso eh? –espere pero nada- ya Tom…basta –caminé hacia los vestidores que había ahí pero no lo vi, salí y me volví a acercar a las sillas –aish…Tom juro que si no apareces en este instante yo…-no pude terminar porque sentí como unos brazos me tomaban de la cintura, me estremecí
Tom: tú qué? –apoyo su barbilla en mi hombro- que harás?
Aqua: yo…-ahora que decía? El me había tomado por sorpresa y mi mente estaba en blanco
Tom: uuyy que mala –rió
Aqua: tonto –me cruce de brazos
Tom: una bromita, no te enojes si? –con sus manos me hizo girar y quedar frente suyo
Aqua: está bien pero no lo vuelvas a hacer ok?
Tom: nunca más, ahora…entramos? –dijo señalando la piscina
Aqua: okey –me quite mi pareo y lo tire a la silla, al voltearme vi que Tom estaba caminando para adentro- Tom que haces? –no me contestó solo me sonrió y cuando menos lo sentí lo vi correr hacia la piscina y en segundos ya estaba toda mojada- ¡Tom!
Tom: qué? –dijo ya parado, iba a quejarme pero me quede callada; mi mente otra vez se quedo en blanco pero esta vez fue por mirar a Tom; solo diré que no pude evitar mirar cada detalle de su cuerpo, al notar lo que pasaba por mi mente me sonroje y fije mis ojos en otro punto. Sacudí mi cabeza y antes de que me preguntara o dijera algo hice lo mismo que él y me lance. Al salir note que lo tenía cerca de mí y note otro “pequeño” detalle, que hizo que al instante me tirará a sus brazos- sabía que era irresistible pero no tanto
Aqua: tampoco te creas tanto –le saque la lengua- es que… lapiscinaesmuyhonda –dije “algo” rápido
Tom: ah?
Aqua: la piscina es muy honda…no llego
Tom: oh…ya veo –se quedo pensando un rato y luego sonrió- mejor!
Aqua: y porque?
Tom: porque –me apegó más- así –se acercó a mis labios- puedo tenerte más cerca –dijo y me beso
Aqua: aprovechado –dije riendo, nos seguimos besando. De un momento a otro nos separamos y me miro travieso, no alcance a preguntarle que iba a hacer porque en cuestión de segundos estábamos sumergidos, solo atine a aferrarme a él mientras el nadaba, al salir le di un golpe- Q…que…te…pasa… -dije entrecortada por el agua que había tragado
Tom: una pequeña zambullida –dijo riendo
Aqua: que chistoso –me solté de sus brazos y como pude nade hacia la orilla acercándome a la escalera, iba a salir pero me detuvo agarrándome de una de mis brazos- suelta Tom –dije seria- quiero salir –me miro sorprendido
Tom: yaaa….no fue para tanto o sí?
Aqua: quiero salir Tom, suéltame –esta vez lo dije más enojada, lo mire y vi que se mordía su labio algo nervioso y al minuto me soltó, di un suspiro y baje las gradas y entre nuevamente a la piscina y nade hacia él
Tom: te enojaste mucho? –dijo rodeando sus brazos en mi cintura
Aqua: un poco…es que bromeas algo pesado Tom…no me molesta que bromees, me encanta que lo hagas
Tom: pero?
Aqua: pero a veces te pasas un poco con las bromas…entiendes? No quise hablarte así…es solo que ando algo sensible, no sé porque…olvidémoslo si? –Roce mis labios con los suyos- bésame –cerré mis ojos y sentí como posaba sus labios sobre los míos haciéndome sentir en las nubes; lo apegue más no quería soltarlo pero el corto el beso
Tom: no más bromas pesadas –dijo jugando a rozar nuestras narices
Aqua: muy bien
Seguimos parte de la tarde nadando, bueno corrijo el nadaba porque yo no daba como, trato de enseñarme un poco pero creo que era más fácil que me hundiera a que flotara, el solo se reía. No volvimos a “pelear” por lo que agradezco, andaba algo rara, por todo sentía que lloraría, asique evitamos cualquier tipo de discusión por más leve que fuera. Ya cuando estábamos cansados nos sentamos en las sillas que estaban frente a la piscina y nos pusimos a tomar unos licuados de fresa con leche que mi “esposo” había preparado y que no es por presumir pero estaban deliciosos pero al parecer a mi estomago no le cayeron bien porque ni bien tome unos sorbos sentí unos fuertes dolores en el estomago y corrí directo al baño, no tengo que especificar que hice. Estuvo unos minutos sentada en lo que me calmaba, Tom vino a ver qué pasaba y me vio, asique no es de extrañarse que me obligara a ir con un doctor, según el yo estaba muy mal. Asique sin más que decir subimos, nos cambiamos y subimos al auto camino a un doctor, Tom hizo unos llamados y luego me informo que iríamos con uno que es el médico que los atiende a ellos.
Estuvimos hablando en todo el camino sobre mi posible “enfermedad” aunque lo que Tom no sabía y no me dejaba decirle es que no me podía enfermar, al menos no de las cosas normales que le podía dar a cualquier humano, era una de mis ventajas al ser ángel, por un momento se quedo callado y aproveche para convencerlo de regresarnos; teníamos apenas dos días más y no los quería desperdiciar en médicos o cosas así.
Aqua: Tom, creo que no me has entendido
Tom: en qué? –dijo sin quitar la vista de la autopista
Aqua: en que yo no me puedo enfermar
Tom: ya sé que no quieres pensar que puedas estar enferma pero es para asegurarnos
Aqua: no no no…no me entiendes, es que literalmente no me puedo enfermar –me miro de reojo- al ser ángel ninguna de las enfermedades me afectan en lo absoluto
Tom: en serio? –asentí- bueno…igual, solo vamos que te chequee y listo si? Hazlo por mí –dijo usando voz de pequeño
Aqua: está bien, pero que sea rápido
Tom: muy bien!
Llegamos al tal edificio en donde trabajaba ese doctor, entramos al edificio tomados de la mano y nos dirigimos al mostrador en donde se encontraba una señorita de mediana edad viendo unos papeles, se detuvo y subió su mirada al estar nosotras frente a ella
Señora: en que puedo ayudarles?
Tom: venimos a ver al doctor Schneider
Señora: tienen cita?
Tom: si, está a nombre de Aqua de Kaulitz –no prestaba atención pero lo último si lo escuché, sonreí
Señora: permítame, ahorita verificaré, mientras esperan pueden tomar asiento, yo los llamaré –hicimos caso a la señora y nos sentamos en las sillas que estaban puestas a un lado de la pared, mientras esperábamos estuve recostada sobre su hombro, tenía un poco de sueño. Al notarlo Tom empezó a hacerme mimos como arrullándome, no tarde en caer dormida; no sé cuánto tiempo pasó pero desperté por la voz de Tom que me llamaba –vamos, ya nos toca –sobe mis ojos, nos levantamos y caminamos hacia una puerta en donde un señor algo mayor nos estaba esperando
Schneider: buenas tardes, pasen –entramos, lo primero que vi fue la camilla en el centro del cuarto, al lado un escritorio con dos sillas enfrente –bueno, tiempo sin verte Tom
Tom: si doc, ya tiempo
Schneider: si, creo que la última vez que te vi fue cuando tenias diez años, como has cambiado y casado verdad? –dijo mirándome, tomo unas fichas –Aqua cierto? –Asentí- bueno, Tom me ha descrito un poco lo que sentías pero porque no mejor me lo dices tú –toma asiento –me señalo la camilla; suspiré y me senté
Aqua: bueno, en la mañana tuve un poco de dolor de estomago, nauseas, y por la tarde lo mismo…y bueno he estado algo sensible
Schneider: ya veo –dijo y anoto unas cosas en una libreta que tenía en sus manos –solo fue hoy?
Aqua: si, creo que es por unos problemas en los últimos días nada más
Schneider: puede ser aunque prefiero hacerte unos exámenes solo para estar seguros okey?
Aqua: no creo que sea necesario
Tom: amor...
Aqua: ok, ok…
Schneider: muy bien, primero le tomaré una muestra de sangre –muestra de sangre? No entendí, el se volteo y busco algo en unas gavetas, al voltearse vi que en sus manos tenía un tubito extraño pero lo que si me asusto fue la cosa puntiaguda que tenía, al instante me baje de la camilla, pero tengo tan mala suerte que no pude huir porque alguien me detuvo, fue Tom
Tom: vamos, es para ver que no tienes nada –me susurro
Aqua: pero ya te dije que no tengo nada –hable igual- no quiero –dije con un hilo de voz
Tom: será rápido…ven –me jaló y sentó nuevamente en la camilla- solo pondrá esa aguja unos segundos en tu brazo y listo, ok?
Aqua: pero…
Tom: vamos…-me dio un besito- si?
Aqua: -suspiré- ya, pero no te vayas –sonrió y me abrazó
Schneider: bueno, -tomo mi brazo, le paso una cuerda de hule y la ato en mi antebrazo algo fuerte –esto es para resaltar tu vena –me explico, yo solo asentí, por mí que no me explicará yo solo quería irme; estuvo viendo mi brazo un rato, hizo un ruidito con su boca y al rato tomo la “jeringa” que así se llamaba eso, le puso la aguja y lo acerco a mi brazos –necesito que no tenses tu brazo porque sino no podré hacerlo
Aqua: okey
Schneider: muy bien, ahora si quieres toma un respiro y mira para otro lado –vi que ya estaba por clavar la aguja asique tal y como me lo dijo, respire y voltee para no ver, apoye mi cabeza en el pecho de Tom quien no me había soltado; sentí un dolor agudo que recorrió todo mi brazo y me hizo soltar un pequeño gemido, respire profundamente mientras sentía como la aguja entraba lentamente en mi piel doliendo como si no fuera solo una sino miles, una lágrima escapo de mis ojos –listo, llevaré esto a laboratorio y en un rato vuelvo con el resultado –antes de irse me dejo con un pequeño pedazo de algodón pegado en el punto donde la aguja había pasado, tomo mi muestra de sangre y se fue
Tom: ya paso mi amor –me abrazo más fuerte –dolió mucho?
Aqua: un poquito
Tom: que te haría sentir mejor? –me separe de él y con mi mano acerque su rostro al mío
Aqua: tus labios –dije y no espere respuesta y lo bese. Corrió sus manos tomando mi cintura y quedamos más juntos de lo que estábamos. Esta vez no fue él quien nos hizo separar sino el doctor que entro
Schneider: perdón, bueno tardamos un poco pero ya tenemos los resultados, tomen asiento –me levanté de la camilla y junto a Tom me senté en las sillas enfrente del escritorio
Aqua: estoy bien verdad?
Schneider: si, de hecho estas muy bien, bastante saludable diría yo
Tom: pero si está saludable a que se deben los dolores y demás?
Schneider: bueno, algo temprano para todos los malestares pero para alguien en tu estado es normal
Aqua: alguien…en mi estado? Me temo que no entiendo, a que se refiere?
Schneider: felicitaciones…estas embarazada…
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